Con apertura de molinetes en Federico Lacroze,
Dorrego y Malabia se desarrolló la jornada de
protesta en la línea B. El acoso permanente por
parte del personal de gerencia y seguridad de
Metrovías no logró impedir la medida de fuerza de
los trabajadores, el accionar de la pandilla de la
empresa llegó a extremos tales, como por ejemplo
cuando el Sr. jefe de la línea B (cual punguista)
sustrajo de la mano el pase personal a un delegado
gremial, una actitud más propia de un bandido que
de un caballero, lo que motivó que el damnificado
se dirigiera a la División Subterráneos de la Policía
Federal Argentina a radicar la denuncia.
Dorrego y Malabia se desarrolló la jornada de
protesta en la línea B. El acoso permanente por
parte del personal de gerencia y seguridad de
Metrovías no logró impedir la medida de fuerza de
los trabajadores, el accionar de la pandilla de la
empresa llegó a extremos tales, como por ejemplo
cuando el Sr. jefe de la línea B (cual punguista)
sustrajo de la mano el pase personal a un delegado
gremial, una actitud más propia de un bandido que
de un caballero, lo que motivó que el damnificado
se dirigiera a la División Subterráneos de la Policía
Federal Argentina a radicar la denuncia.
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